El pasado sábado 25 de abril, el Hotel Washington Hilton de Washington DC, acogió la cena anual de la Asociación de Corresponsables de la Casa Blanca para recaudar fondos para becas para jóvenes periodistas y entregar los premios a los periodistas más reconocidos del año.

A pesar de que por primera vez en 20 años una mujer, Cecily Strong, se encargó de dirigir la gala, fue de nuevo el presidente Barack Obama quién acaparó todo el protagonismo con su tradicional tono irónico y de broma durante su discurso.

Tuvo momentos para recordar algunas de las decisiones más controvertidas del último año, como el acuerdo con Cuba o la reforma migratoria, pero aprovechó la oportunidad para bromear sobre su estado físico y, sobre todo, atacar a sus adversarios republicanos.

Bienvenidos al último cuarto de mi presidencia. Por esto Michelle está brindando”, comenzó el Presidente. “Me veo tan viejo que John Boehner (speaker de la Cámara de Representantes) ya ha invitado a Netanyahu a mi funeral, Mientras tanto mi mujer no ha envejecido ni un año. Yo le pregunto cuál es su secreto y me dice “frutas y verduras”. Es agravante”, bromeó Obama.

Los republicanos Marco Rubio, Ted Cruz o el ex vicepresidente Cheney fueron objetivo directo de muchas de sus bromas: “Ahora ningún ciudadano debe temer perder su seguro médico si se queda sin trabajo. Gracias, senadores republicanos”, ironizó el Presidente por la negativa constante de los conservadores ante la reforma sanitaria. Pero también tuvo tiempo para dirigirse a su vicepresidente, Joe Biden, o a la candidata demócrata para 2016, Hillary Clinton: “Tengo una amiga que hace unas semanas estaba haciendo millones de dólares al año y ahora vive en una furgoneta en Iowa”.